Quando vejo esmorecer um trabalho missionário edificado com tanto esforço, com tanto amor e determinação, firmado na renúncia e resignação, aumenta em meu coração a convicção de que fazer missões e a evangelização dos povos não é um compromisso ou prioridade das instituições evangélicas e suas lideranças, mas da genuína Igreja de Cristo, que se move por amor às almas. É aí que percebemos, que "Missões" está no sangue, não nas palavras!
Cuando veo desvanecer un trabajo misionero edificado con tanto esfuerzo, amor y determinación, firmado en la renuncia y resignación, crece en mi corazón la convicción de que la evangelización de los pueblos a través de las misiones, no es un compromiso o prioridad de las instituciones evangélicas y sus líderes, sino de la verdadera Iglesia de Cristo, que se mueve por amor a las almas. Así entendemos, que el hecho de hacer "misiones" se encuentra en la sangre de un escogido, no las palabras de los religiosos!
Por Elder Dayvid Morais.